TIEMPO DE LIBERTAD

Hubo una época -que hoy resulta tan lejana- en donde el sexo se practicaba sin restricciones. Con la llegada del VIH-sida, para disfrutar de un encuentro casual, se hizo obligatoria la pausa de la precaución. El filme Les témoins está ambientado a mediados de los ochenta, cuando recién empezaban a manifestarse los primeros brotes de esta enfermedad. Por aquel entonces, todo era confusión y desconfianza, porque se ignoraban los mecanismos de transmisión y los síntomas de esta afección.

Su director, André Téchiné, es considerado el crédito del cine francés y esta predilección se hace notar en cada edición del Festival de Cannes, donde sus películas son presentadas como un acontecimiento mundial. Dos de sus actrices fetiches son Emmanuelle Béart (J'embrasse pas – 1991; Fugitivos – 2003; Los testigos – 2007) y Catherine Deneuve (Los tiempos cambian – 2004; Secretos de amor – 1981; Toda una mujer – 1986; Mi estación preferida - 1993 y Los ladrones – 1996), quien en varios de estos títulos, compartió cartel con Daniel Auteuil. Esta breve introducción de su filmografía sirve para comprender la relevancia de sus trabajos.

Lo curioso del caso es que un director tan experimentando como Téchiné, que lleva 43 años en esta profesión, haya realizado una película que atrasa 20 años. Porque desde lo argumental, no aporta nada diferente a lo que ya se mostró en Philadelphia (1993), And the band played on (1993), Les nuits fauves (1992) y tantas otras similares. Acaso el único mérito es haber centrado el problema en un grupo de cinco personas, cuyo denominador común en sus relaciones, es un joven que ha sido infectada por el virus.

De qué va. Un muchacho proveniente del sur de Francia llega a París y conoce a un cincuentón homosexual que lo relaciona con una pareja de amigos heterosexuales que acaban de tener un hijo.

La seductora Béart, encarna a una escritora de libros infantiles casada con un policía de origen magrebíAl hueso. Aunque la cuestión del VIH-sida es la columna vertebral de Les témoins, la problemática es abordada ligeramente en el arranque, para diluirse gradualmente. Al promediar el metraje, todo parece indicar que el nudo argumental se va a ajustar a las pasiones de los protagonistas.

Pero llega un punto del relato en que todo lo que había para decir sobre sus vidas amorosas quedó expuesto. Para motivar la curiosidad del espectador, es preciso que se desarrollen otras situaciones. En este escalón es donde tropieza el argumento. Porque en lugar de disparar nuevos conflictos que alumbren el desenlace, Téchiné prefirió apagar todos los focos para que nadie se lleve una sorpresa en el último tramo. Y lo que hubiera sido un cierre obvio pero decoroso cuando surgieron los primeros tratamientos, con el nivel de información actual, la conclusión se convierte en polvo de olvido.

En definitiva. Si bien el filme no aburre, hay que reconocer que tampoco sorprende en ningún momento con su propuesta.
Score 4/10

TITULO: Los testigos Afiche de Los testigos
ORIGINAL: Les témoins
ESTRENO: 2 de octubre, en Argentina
ORIGEN: Francia
AÑO: 2007
DURACION: 115 minutos
DIRECTOR: André Téchiné
REPARTO: Michel Blanc (Adrien), Emmanuelle Béart (Sarah), Sami Bouajila (Mehdi), Julie Depardieu (Julie), Johan Libéreau (Manu), Constance Dollé (Sandra), Lorenzo Balducci (Steve)
GUION: André Téchiné, Laurent Guyot y Viviane Zingg
MUSICA: Philippe Sarde
FOTOGRAFIA: Julien Hirsch
VESTUARIO: Khadija Zeggaï.
SITIO OFICIAL


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