POLVO DE ESTRELLAS

Pacino y De Niro se vuelven a juntarLa excusa comercial en Asesinato justo (Righteous Kill) es ver a dos actores legendarios en un mismo cartel. Y un poco la idea que se barajó para este tercer encuentro cumbre (los anteriores fueron El padrino II – 1974 y Fuego contra fuego – 1995) fue, si con uno alcanza con los dos es afano. Y casi sin pestañar, el grueso del presupuesto se invirtió en la contratación de estas luminarias. Con las monedas que le quedaron en el fondo del saco, llamaron a un cara.de.cuatro para que dirija a los veteranos, pactaron con un guionista barato para que mezclara algunas líneas y como a la productora todavía le sobraba un vuelto, decidió convocar a más figuritas. Lo que se dice, tirar manteca al techo.

Después de filmar Casino (1995) con su amigo Scorsese, algún quebranto moral embargó al complaciente Robert de Niro porque desde aquel entonces, no pudo (no supo) encontrar un abrigo para su talla. En los últimos años, lo único que hizo fue parodiar sus grandes creaciones y despilfarrar su credibilidad en filmes mediopelo que utilizaban su expresión torcida para facturar en las boleterías. Desde las comedias más absurdas como Analízame (1999), hasta bodrios como Hombres de honor (2000) o Mente siniestra (2005) que da vergüenza ajena.
El caso de Al Pacino es distinto. Porque con la astucia de un tipo que sabe a quien vender su imagen, conseguía disimular un poco su decadencia alternando buenas y mala. Pero tanto las desgracias como las alegrías llegan a su fin y a un metro de la realidad empieza la primer fila de butacas.

De qué va. Dos detectives se enfrentan a un asesino bastante ingenioso que conoce al detalle todas las pesquisas y procedimientos. En el círculo interno de la fuerza se presume que el criminal puede ser un policía.
Cuadro de imágenes en donde está el músico 50 Cents y Carla Gugino
Al hueso. La idea de Asesinato justo no es contar una historia cautivante, generar debate o movilizar al público a fuerza de adrenalina. La única motivación que se esconde en esta propuesta es mostrar a De Niro y Pacino juntos. Y que nadie pretenda algo más. La trama se apoya en un guión tan mediocre y cargado de lugares comunes, que hasta resulta fastidioso intentar describirlo.

Los protagonistas no son zonzos y saben a lo que se enfrentan. El filme es tan previsible que desde la primer toma produce somnolencia. Lejos de intentar rescatarlo desde lo actoral, la dupla prefirió no malograr esfuerzos en algo que carece de salvación.
La poca acción que puede entregar aparece aislada, fuera de contexto, incapaz de inquietar al espectador menos pretencioso. Para intentar darle un poco de vértigo a la narración, en algunas escenas de diálogo se intercalan fotogramas a gran velocidad. Lo único que consiguen con esta técnica es sumarle mayor confusión a un argumento que por momentos pierde toda ilación lógica.
Pero a no inquietarse, fanáticos de los mitos. Para el año próximo la dupla de gerontes volverá a filmar Fuego contra fuego y la dirección correrá por cuenta de Michael Mann. Hasta ese entonces.

En definitiva. Un filme fácil de olvidar, sin mística, que se convierte en una sucesión de clichés desafortunados. Eso sí, plagado de estrellas.
Score 4/10
Afiche de Righteous Kill
TITULO: Asesinato justo
ORIGINAL: Righteous Kill
ESTRENO: 13 de noviembre, en la Argentina
ORIGEN: EE.UU.
AÑO: 2008
DURACION: 101 minutos
DIRECTOR: Jon Avnet
REPARTO: Robert De Niro (Turk), Al Pacino (Rooster), Curtis "50 Cent" Jackson (Spider), Carla Gugino (Karen Corelli), Donnie Wahlberg (detective Ted Riley), Trilby Glover (Jessica), Brian Dennehy (teniente Hingis), John Leguizamo (detective Pérez), Dan Futterman (Aaron Ziedler), Rob Dyrdek (Rambo).
GUION: Russell Gewirtz
MUSICA: Ed Shearmur
FOTOGRAFIA: Denis Lenoir

SITIO OFICIAL


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